El mes pasado recibimos en dos ocasiones a un grupo de ASPRONA para continuar con nuestra colaboración con este centro asistencial de personas con discapacidad intelectual. 

La programación de actividades que oferta el Departamento de Didáctica de la Fundación invita a estimular las funciones sensoriales de los participantes, perfeccionando habilidades sociales y desarrollando la autonomía personal y la autoestima, desde una perspectiva creativa, atractiva y vivencial en un contexto normalizador e inclusivo.

En esta ocasión, hemos trabajado la actividad “Horticultores” en dos sesiones con un grupo heterogéneo con diversos problemas motores e intelectuales.

La actividad consistía en visitar uno de los huertos que hay en el pueblo de Cerezales, para conocer los cultivos de la zona y el modo en el que los horticultores cuidan sus plantas: regado, abonado, eliminación de malas hierbas, etc. La intención es conocer los tipos de hortalizas y frutales que se suelen plantar aquí y colaborar en actividades cotidianas de cuidado del huerto como el regado o la recolección.

Esto permitió que el grupo tuviera un contacto con la naturaleza poco habitual en el centro de día, debido al gran número de personas que asisten al mismo y la diversidad de sus discapacidades.

Interactuar con la tierra, las plantas, disfrutar de los olores y también de los sabores de los productos de la huerta es una actividad que les aporta autonomía y relajación. Para el equipo de la Fundación y sus colaboradores, resulta muy gratificante y sin duda, continuaremos trabajando en esta línea.

Más imágenes en el álbum de Flickr.

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